“Si me sale te va a salir mejor”. Metemos en el horno, calentado anteriormente, a 180º C y ponemos en el horno unos 20 minutos. En cuanto la masa se deje amasamos un poco hasta conseguir una masa lisa. De a poco vamos a ir mezclando los elementos líquidos con los secos.
Este delicia pertence a los dulces tradicionales mucho más populares dentro de la repostería de españa. Así sea por su relevancia cultural o simplemente porque siempre y en todo momento se han listo en el hogar. Las rosquillas de anís tienen algo inexplicable que nos hacen revivir los más destacados recuerdos de nuestra infancia.
Las mías quedaron algo blanquitas pero muy muy ricas.
Ve añadiendo la harina y mezclando con una varilla hasta que la masa se suelte de las paredes del envase (puede admitirte más o menos cantidad de harina). Aprende a realizar las tradicionales rosquillas de anís de manera casera con esta receta de Eva Arguiñano. En la galería de imágenes observamos paso a paso de qué forma llevar a cabo rosquillas de anís. Trabaja esta mezcla en una área rebozada de harina y deja reposar unos 30 minutos.
Paso 1
Las rosquillas se mantienen más tiempo frescas si una vez frías las colocas en una caja de cartón y después las cierras con papel plástico. Colamos el aceite en un bol y lo dejamos templar. Calentamos el aceite junto con la piel de un limón, sin dejar que llegue a ebullición. Recibir un correo electrónico con cada nueva entrada.
Ubicamos los roscos de anís sobre papel de horno en una bandeja y horneamos a 180º entre 20 y 30 minutos. En un bol extenso ponemos la harina con la sal, el azúcar y la levadura. Agregamos el aceite temperado y el vino y mezclamos bien hasta hallar una masa muy traje que no se pegue a las manos. Estos roscos de anís o vino dulce al horno son mucho más rápidos que las tradicionales rosquillas fritas.
Roscos De Anís Al Horno, Un Dulce Tradicional De Navidad
Podemos comerlas de esta manera, o rebozarlas en azúcar glas o una mezcla de azúcar glas y canela en polvo. Forramos una bandeja con papel de horno y ubicamos las rosquillas sobre él. Como llevan levadura, las rosquillas van a crecer en el horno con lo que no podemos ponerlas muy juntas. Llevar a un bol, sumergir los roscos , y dejar secar una media hora.
A continuación, estira un cilindro angosto y da forma a las rosquillas. La mayor parte de los ingredientes para llevar a cabo esta receta se acostumbran a tener en el hogar. Lo único que puede faltar es el anís, que en un caso así es imprescindible.
Si Bien Lo Mucho Más Frecuente Es Freír Las Rosquillas, En Esta Receta Los Elaboramos De Manera Mucho Más Saludable
Si lo haces así ten en cuenta que el aceite debe enfriarse antes de poder integrarlo en la masa. Hasta entonces tenemos la posibilidad de elaborar el almíbar en el que las vamos a duchar para darle ese plus de dulzor que tanto nos gusta. La mayor parte de los ingredientes para elaborar esta receta se acostumbran a tener en la vivienda. Lo único que puede faltar es el anís, que en un caso de esta manera es indispensable. En un cazo ponemos el azúcar, el aceite y el anís, lo llevamos a ebullición a fuego medio hasta el momento en que se deshaga el azúcar. En el momento en que estén listas, las sacamos, las dejamos sobre una reja a fin de que se enfríen y tengamos la oportunidad manipularlas sin quemarnos.
Recibir un correo electrónico con los próximos comentarios a esta entrada. Ponemos en un cuenco azúcar glass y cada rosco lo rebozamos en el azúcar. Hacemos bolitas con el tamaño de una nuez que ponemos sobre papel vegetal en la placa del horno. Hacemos un agujerito en el centro de la nuez algo aplanada. Puedes usar el mango de una cuchara o un dedo índice limpio.
Este delicioso dulce habitual nos obsequia momentos al lado de nuestros seres mucho más estimados. Aunque se pueden localizar en todos las tiendas, elaborarlos en casa es tan simple con esta receta punto por punto, que vale la pena gozar de su sabor casero. Además, es ideal para hacerla con los peques de la vivienda, dada su simplicidad y el entretenimiento que genera siempre y en todo momento amasar con las manos. Los roscos de anís se preparan con facilidad y se puede aromatizar la masa a tu gusto con unas semillas de sésamo o un poquito de canela molida. Asimismo se puede añadir ralladura de naranja o limón.