Ambas frutas son una fuente fundamental de fibra, lo que las dota de un prominente poder laxante que nos asiste a sostener nuestro cuerpo libre de sustancias tóxicas que tan mal le hacen. Más allá de todo no es requisito que nos decantemos solo por una opción alternativa, ámbas son igualmente buenas y en verdad no está reñido comer melón y sandía. “Si el melón tiene un índice glucémico medio, de 60, el de la sandía es de 70, que se considera sobresaliente”. Esto significa que la sandía, con un mayor índice glucémico, provocará un pico de glucosa en sangre que hará que volvamos a requerir azúcar en poco tiempo. La mandarina es la fruta más afín a la naranja en características organolépticas y alimentarias.
Al tiempo, la sandía tiene dentro más zinc y fósforo y es mucho más baja en sodio, con 1mg por 100g. El melón tiene dentro 1,11g de proteínas por 100g, lo que es sutilmente superior al de la sandía, cuyo contenido en proteínas es de 0,61g por 100g. El melón contiene 5,69 g de azúcares totales por 100 g, al tiempo que la cifra de la sandía es sutilmente superior, unos 6,2 g por 100 g.
Se probó que incrementar el consumo de potasio en el día a día incentiva la seguridad en la presión arterial, progresando los inconvenientes de hipertensión. El melón es algo mucho más dulce que la sandía -tiene un 10% azúcar-, y asimismo con independencia del tipo, tienen exactamente la misma cantidad de azúcar. El melón piel de sapo, si está muy verde, puede emplearse en ensaladas en tanto que tiene un gusto similar al pepino. Famoso por su bajo contenido en calorías encontramos por cada cien gramos de producto unos 8 gramos de azúcar.
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Las dos son bajísimas en calorías a causa exactamente de este contenido elevado en líquidos, lo que las convierte en alimentos muy recomendados en dietas de adelgazamiento. La sandía por ejemplo es un género de fruta que tiene más agua en su composición y muy poco azúcar. Resalta su alto contenido en vitamina C y A y en minerales como el potasio que se dedican a regular nuestro organismo.
También debemos reconocer que puestos a planteárnoslo, nos pica la curiosidad, así que hemos sondeado las creaciones alimenticias de las dos frutas. En este sentido, la sandía es uno de esos alimentos que no pueden faltar durante estos meses de calor en nuestro frigorífico. Charlamos de una fruta que gusta a bastante gente y que está en su mejor momento entre los meses de junio y septiembre. Como estas frutas contienen grandes cantidades de agua y bajas en calorías, los dos alimentos tienen la posibilidad de influir de forma positiva en la pérdida de peso generalmente. Además, con moderación, las dos frutas pueden ser opciones a estimar para la dieta ceto, ya que las proporciones totales de carbohidratos son bastante bajas en la sandía y el melón. Pese a que tanto sandía como melón son 2 frutas de verano muy recomendables, en tanto que son que hidratan, diuréticas y saludables, Sánchez sugiere primar el melón sobre la sandía.
¿Es Verdad Que La Sandia Contiene Mucha Azúcar?
Así, casi no hay diferencia entre ámbas frutas, si bien sí que es cierto que el melón está sutilmente sobre la sandía. Los dos alimentos tienen un bajo contenido en hidratos de carbono; el melón tiene dentro 6,58g por 100g, y la sandía 7,55g por 100g. Tiene dentro 0,9 g de fibra por 100 g, al paso que la sandía solo contiene 0,4 g por 100 g. El melón tiene de media 86 gramos de agua por cada cien gramos de producto, mientras que la sandía tiene 93 gramos de agua por cada 100 gramos de producto.
Es otro género de azúcar hidrosoluble, que está contenida en casi todas las frutas, y de allí su nombre. La investigación probó que la substitución de galletas bajas en grasa por sandía incrementa la saciedad hasta 90min tras su consumo. Además de esto, este país es el mayor exportador del mundo de sandías y, de ahí que, es posible hallar ejemplares de cultivos próximos en nuestros supermercados. Se dice bastante del melón que es una fruta de forma especial rica en antioxidantes, pero lo cierto es que tiene exactamente exactamente los mismos que una manzana, y que existen otras frutas y hortalizas que tienen muchos más. Los antioxidantes importan para prevenir la oxidación de las células, relacionada con patologías degenerantes, y acostumbran a hallarse en frutas y verduras, de manera especial arándanos, fresas, frambuesas, espinacas o brócoli.
Qué Tiene Más Azúcar El Melón O La Sandía
Sea como sea nuestra opción la fruta es siempre buena para el organismo por la proporción de beneficios que nos ofrece. Cerca del 90% de su composición es agua, aunque en el caso de la sandía es mayor que en el del melón. Esta característica las transforma en una fruta refrescante y apetecible para los meses del verano en el momento en que el calor más aprieta.
El melón tiene de media 86 gramos de agua por cada cien gramos de producto, al paso que la sandía tiene 93 gramos de agua por cada cien gramos de producto. Esto es que todavía es la sandía la que menos engorda, puesto que contribuye 0 kilocalorías al alimento. Por lo que se refiere a los azúcares, los hidratos de carbono del melón son 12,4 gramos, de los cuáles 1,6 son de glucosa libre, 1,3 gramos de fructosa y 9,50 de sacarosa, que es por su parte glucosa y fructosa. Además, abusar de un solo alimento hace que dejemos de consumir otros que asimismo son precisos. En relación a la sandía, solo contribuye 5,6 gramos de hidratos de carbono, todos ellos, exactamente por igual, moléculas de glucosa y fructosa. Más allá de que tanto sandía como melón son 2 frutas de verano muy aconsejables, pues son que hidratan, diuréticas y saludables, Sánchez recomienda primar el melón sobre la sandía.
“Si el melón tiene un índice glucémico medio, de 60, el de la sandía es de 70, que ya se considera prominente”. Esto significa que la sandía, con un mayor índice glucémico, provocará un pico de glucosa en sangre que hará que volvamos a requerir azúcar en escaso tiempo. La fuente que utilizamos para entender los valores alimentarias de los alimentos esta vez es Google+ plus, que recopila datos del USDA y de otras entidades preparadas. La mandarina es la fruta considerablemente más similar a la naranja en características organolépticas y alimenticias. Un poco mucho más dulce que la naranja y con una menor acidez tenemos la posibilidad de ver que esta fruta tiene unos diez gramos de azúcar por cada cien gramos de peso neto.
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Que se trate de frutas muy similares y propias del verano no quiere decir que no logren consumirse al tiempo. Ambas son muy bajas en calorías a causa precisamente de este contenido elevado en líquidos, lo que las transforma en alimentos muy recomendados en dietas de adelgazamiento. La sandía por poner un ejemplo es un género de fruta que tiene mucho más agua en su composición y poquísimo azúcar.